Anédocta en el Nilo

Hace unos años cuando yo fui en un crucero con mi familia en el Nilo, Egipto. Me acuerdo que alli,  los vendedores de las tiendas siempre insistían en vender su propia ropa. En un paseo, en el Nilo, en un pasaje muy estrecho, había muchos vendedores que nos tiraban, a nosotros,  los pasajeros, a nuestros balconcitos,  alfombras y telas. Los egiptos estaban dispuestos de vendernos toda su mercancia. Mi padre empezaba negociar con un vendedor sobre una alfombra y cuando estuvieron de acuerdo, el vendedor lanzó la alfombra a nuestro balcon al mismo tiempo que mi padre ponía el dinero en una bolsa para el vendedor. Cuando el vendedor recibió la bolsa y contó el dinero, el  vendedor empezó a gritar como un loco porque según él, mi padre le dio una cantidad equivocada, que por supuesto no era cierto. Y en este momento todos los pasajeros nos miraban para presenciar el evento y me puse mucho vergüenza.